Parlamento de Eduardo López-Dóriga

03 - 10 - 2014 / AT
AT

Parlamento de Eduardo López-Dóriga, presidente

Buenas tardes a todos y muchas gracias por haber venido a este acto de entrega del XX (vigésimo) Premio a la Tolerancia a Inger Enkvist.

Permítanme que antes de dedicar unas palabras a Inger les haga en un brevísimo paréntesis un recorrido por las actividades realizadas en el último año por nuestra asociación.

Tras la entrega del XIX Premio a la Tolerancia a Victoria Prego hace un año, en nuestras actividades estuvo presente la preocupación por la denuncia del terrorismo y la defensa de las víctimas del terrorismo. Participamos en Octubre en la manifestación de la AVT, presentamos el interesantísimo libro de Teo Uriarte “Tiempo de canallas. La democracia ante el final de ETA” y celebramos nuestro XII Ciclo de cine que contó con el apoyo de la Fundación de Víctimas del Terrorismo y cuyas mesas redondas se centraron en el tema del terrorismo.

Marita Rodríguez, nuestra“presidenta de toda la vida”, como muy bien la definió Arcadi Espada, participó en la presentación del libro “Historia de la Resistencia al nacionalismo”, de Antonio Robles, el primer presidente de la Asociación por la Tolerancia, a quién debemos agradecer no sólo una parte fundamental de la paternidad de este premio, sino muchas otras cosas más. El libro recoge entre otras cosas el papel destacado de nuestra asociación en aquellos años oscuros en los que muy pocos se atrevían a manifestarse contra el poder nacionalista o contra la doctrina semi-nacionalista dominante en el PSC, como sí que hizo desde dentro Julio Villacorta, que ha sido miembro de nuestro jurado que eligió a Inger.

Desde AT participamos en la organización de las concentraciones del Día de la Hispanidad y del Día de la Constitución a través de la plataforma “Som Catalunya.Somos España”. El diario Ara dijo del 12-O pasado que el “españolismo” había tocado techo. Ese diario fue el que puso en el “rincón de pensar” a la filóloga Sonia Sierra, que participó en nuestro jurado.
Para este año “Societat Civil Catalana” ha tomado el relevo y será quién organizará la concentración del próximo 12 de Octubre en la Plaza de Cataluña. Su presidente Josep Ramón Bosch, también fue miembro del jurado del premio. También quiero destacar el trabajo que ha realizado en SCC su secretario, Pepe Domingo, exvicepresidente de Tolerancia, que siempre está ahí, luchando incansablemente en todos los frentes.

Estas movilizaciones son muy importantes y les invito a que participen en la del domingo 12 de Octubre. En una ocasión Inger nos recordaba las palabras de la filósofa Hannah Arendt, quién decía que los totalitarismos que estudió “no exigieron que todos creyeran en lo que decían; la exigencia era callarse, no manifestarse públicamente en contra”.

Por ello no tenemos que callar y debemos salir a la calle y demostrar que no nos silenciarán a pesar del acoso que sufrimos. ¿O no es acoso a cada uno de nosotros las dianas y las pintadas en las sedes del PP, y las agresiones a algunos de sus miembros? ¿O no son acoso a cada uno de nosotros los recientes gritos e insultos contra C’s en la Diada y la foto de la bala en la cabeza de Albert Rivera que le enviaron a su casa?¿O no es acoso a cada uno de nosotros la impune invasión de la sede de UPyD y las amenazas a Rosa Díez en la universidad Autónoma que le impidieron dar una conferencia?

Volviendo a nuestra premiada, Inger siempre ha acudido cuando le hemos pedido que participara en alguna de nuestras conferencias o cuando se lo pidió Antonio Robles para la presentación de su libro. El discurso de Inger en dicha presentación fue claro y brillante. Nos insistió en la importancia de que la relación de un profesor con el alumno debe ser una relación de confianza ¿Cómo puede alguien aprender de alguien que no es de confianza, alguien que tiene una agenda oculta además de enseñar conocimientos, y cómo puede un profesor traicionar esa confianza del alumno poniéndole, de contrabando, otras ideas que no pertenecen a lo que debe enseñar un profesor?”

Inger insistía sobre el tema de la ocultación de las verdaderas intenciones del nacionalismo diciendo : “no tenemos felizmente el mismo tipo de totalitarismos que en los años 30 y 40 pero más bien quizás la nueva tendencias es que se presentan como víctimas. El victimismo que también apelando a la compasión hablando de justicia, hablando de derechos humanos, hablando de democracia va imponiendo lo que quiere. Les funciona muy bien al comienzo porque al comienzo son minorías y no son peligrosas, pero paso a paso y con las palabras que ocultan, lo que está sucediendo es que avanzan sus posiciones”.

Pues bien la agenda oculta del nacionalismo es precisamente el subtítulo del libro de nuestro premiado y asociado Francesc de Carreras titulado “Paciencia e independencia”, que se presentó este mismo año.

Y es que esa ha sido la estrategia nacionalista. La puesta en práctica paciente, a fuego lento, de esa agenda oculta hasta conseguir el objetivo último de la independencia.

Ya en Octubre de 1990, El Periódico desveló un documento que corría por las altas esferas convergentes y que consistía en una precisa hoja de ruta para conseguir ese objetivo, y cuyos ejes definía así un periodista en aquel entonces: La obsesión por inculcar el sentimiento nacionalista en la sociedad catalana, propiciando un férreo control en casi todos sus ámbitos” ….. “la infiltración de elementos nacionalistas en puestos clave de los medios de comunicación y de los sistemas financiero y educativo” …”las referencias a un ámbito geográfico -los Países Catalanes- que sobrepasa los límites del Principado” y seguía diciendo ese periodista “Para cumplir sus objetivos, los ponentes no ocultan la necesidad de controlar a los educadores para que cumplan lo estipulado en la doctrina nacionalista. Se aboga, así, por "vigilar la composición de los tribunales de oposición" para todo el profesorado. Asimismo, se alienta a "reorganizar el cuerpo de inspectores de forma que vigilen la correcta cumplimentación de la normativa sobre la catalanización de la enseñanza". También se considera necesario "incidir en las asociaciones de padres".

¿Saben quién era el periodista? ¿Era de El Mundo, de ABC, de la Razón? Pues no. Era el anterior director de La Vanguardia, José Antich, bajo cuya batuta el diario del conde se pasó descaradamente al bando independentista pensando que era el caballo ganador (vamos, lo habitual del conde).

Para saber más sobre La Vanguardia, y algunos de sus periodistas más destacados, por favor no dejen de leer el libro “El manicomio catalán” de Ramón de España, que también fue miembro del Jurado.

Precisamente en una entrevista en La Vanguardia, Inger respondía así a una pregunta sobre la inmersión lingüística “La educación no debería de ser una cuestión política. Cataluña debería permitir a la familia elegir entre el castellano y el catalán como lengua vehicular si lo que queremos priorizar es el dominio del lenguaje.” ….“Entre mi universidad y la catalana había un acuerdo de intercambio de estudiantes, pero no quieren venir por la cuestión del idioma, ellos han estudiado español y quieren perfeccionarlo. Si una sociedad se cierra está quitándole oportunidades a sus jóvenes.

Otro de nuestros miembros del jurado de este año, el periodista Ignacio Martín Blanco, definía recientemente la estrategia nacionalista de CiU como el juego del escondite inglés. Ese en el que alguien (el guardián) se pone de cara a la pared, cuenta a tres y se gira a ver si los jugadores están quietos o se mueven acercándose. Decía Nacho “Disimular es precisamente lo que hasta ahora siempre había hecho CiU: ir dando pasos a la independencia pero sin que se note, como el niño que adelanta su posición cuando nadie le ve.”

Y añadía mirando a Madrid : “Es verdad que el guardián también tiene su parte de culpa, pues a menudo le interesó mirar hacia otro lado, hacer la vista gorda para preservar su privilegiada situación, permitiendo así el tramposo avance nacionalista”.

Del guardián “sedicente socialista”, pero que en realidad se ha comportado como un jugador nacionalista más, por desgracia poco podíamos esperar. Pero que el actual guardián haya promulgado una ley tan frustrante como la LOMCE, eso no se lo podían imaginar ni siquiera algunos miembros de su propio partido en Cataluña, que estarán igual de frustrados que tantos padres que seguiremos sin poder ejercer nuestros derechos.

Como por ejemplo Mónica, miembro de nuestro jurado y socia de Tolerancia, y su marido Marcos, quiénes tras un pleito, asesorado por Convivencia Cívica Catalana, lograron que el TSJC dictara sentencia obligando al colegio a realizar el 25 % de las clases en castellano. Pués de momento sólo han conseguido el rechazo y el acoso por parte del director del centro, de la asociación de padres, del consejo escolar,… que los han tachado de ser responsables de romper la cohesión del centro.

Pero las cosas en Cataluña están cambiando y no sólo porque CiU se haya quitado la careta. Los estupendos estudios de Convivencia Cívica Catalana sobre las mentiras del fraude fiscal, que elabora Jesús Sanz, miembro del Jurado del premio de este año, desgraciadamente no llegaban a mucho público porque eran vetados en los medios de comunicación. Ya no pudieron ocultar tan fácilmente los artículos del exministro Josep Borrell y de nuestro asociado Joan Llorach (también miembro del jurado) titulados: “¿Dónde están los 16.000 millones?”.

Pero tras el cataclismo acontecido este verano con la autoinculpación de Jordi “aranotoca” Pujol, y tras su bronca a los diputados de “su” Parlament que osaban a pedirle explicaciones a él, el Sumo Sacerdote, a él, el de las lecciones de honorabilidad… ¿Aún queda alguien que pueda defender alegremente el “Espanya ens roba” sin que piense que se van a reír de él?

Del currículum de Inger ya les han hablado extensamente Carmen Leal, Merce Vilarrubias y Xavier Pericay, pero de entre todos esos estudios, títulos y méritos que atesora, yo me voy a quedar sólo con uno que puede parecer el más sencillo de todos, pero que en realidad yo creo que es el más importante y el más valioso de todos los títulos profesionales que pueda haber.

Inger Enkvist es UNA BUENA PROFESORA.

Porque ser un buen profesor, ser alguien capaz de transmitir la curiosidad y la ilusión por aprender, es lo más necesario en cualquier sociedad, en cualquier etapa de la historia, en cualquier lugar del mundo.

Las explicaciones de Inger, son tan claras, tan obvias, tan bien argumentadas que deseamos que su charla continúe indefinidamente sin importarnos el reloj…

(Momento clave de la intervención de Inger en el Parlament. Pinchar para ver)

De un buen profesor no te olvidas jamás” nos decía. Pues bien, Inger, nosotros te admiramos y te queremos por tu manera de ser y te consideramos no sólo como una brillante pedagoga, sino como una excelente embajadora del valor de la tolerancia. Eres nuestra buena profesora, y al igual que centenares de alumnos tuyos, siempre te recordaremos.

Pero como yo no tengo ese don, y todos Uds. estarán deseando que acabe de una vez para escucharla, acabaré mi parlamento con otra de las felicitaciones que hemos recibido, que es la de Fernando Savater (III Premio a la Tolerancia) que nos dice:

“Amigos, el premio de este año tiene especial importancia porque recae sobre alguien que se ocupa de la cuestión central en la denuncia del nacionalismo excluyente, si me disculpáis el pleonasmo. Me refiero a la educación. Sin una sistemática, constante y radical perversión de la educación y del papel de la lengua en ella no se habría nunca llegado a la situación actual de quiebra de la democracia en Cataluña. Se ha llamado con desvergüenza "inmersión lingüística" a lo que fue desde el principio "inmersión nacionalista". Personas como Inger Enkvist, con su objetividad profesional, han ayudado decisivamente a que esa manipulación no haya quedado totalmente oculta bajo el espeso manto de propaganda cómplice sostenida a sabiendas por tantos sectarios y sin saberlo por no pocos imbéciles. Por ello merece este premio y sobre todo nuestro agradecimiento democrático. Os mando un cordial saludo.

Fernando Savater.”