En la muerte de Almudena Grandes

04 - 12 - 2021 / DAVID MEJÍA - THE OBJECTIVE | REBECA ARGUDO - LA RAZÓN | JULIO VALDEÓN - LA RAZÓN

En la muerte de Almudena Grandes

«Si el fanatismo es improcedente post mortem debe serlo también en vida […] porque si algo enseñan las guerras civiles es que hay cadáveres que uno vela junto a su enemigo»

DAVID MEJÍA - THE OBJECTIVE

2021-12-04

Almudena Grandes hija predilecta de Madrid

“Y también he escrito esto otro en la edición de Madrid de La Razón, pero por motivos ajenos a mi voluntad y entendimiento solo sale en papel. Así que copipego:

"No entiendo el enfado general ni el griterío por el hecho de que no nombren a Almudena Grandes hija predilecta de Madrid. No porque no merezca ser hija predilecta de ningún sitio, que seguro que lo merece, sino porque me parece una falta de respeto nombrar hija predilecta de ningún sitio a alguien que afirmaba que esa ciudad era un infierno. No a Madrid, sino a ella ¿Quién querría ser, tras su deceso, hija predilecta de un lugar en el que afirmaba, convencida, se atenta contra los derechos y la dignidad de la mayoría ciudadana? ¿Quién de uno donde, lo ha dejado escrito y firmado, es imparable el avance del fascismo, la exclusión social, el machismo y la xenofobia? ¿Quién querría ser hija predilecta de un báratro espantoso, del averno mismo, de las ruinas postapocalípticas de lo que en algún momento fue un buen lugar que habitar? Por respeto, más que nada, por consideración hacia el finado, uno le desearía ser hijo predilecto de un lugar donde vivir no le hubiese supuesto una tortura y un horror durante 26 largos años. Por la misma razón por la que uno no lanzaría las cenizas de un amigo en el portal donde el amor de su vida le dejó por otro, ni llevaría a la tumba de su prima las flores que odiaba y le daban alergia en lugar de sus favoritas, ni daría sepultura a su mejor amiga con el vestido que le hace gorda -ningún vestido te hace gorda, Paula -. Por un elemental sentido del decoro, por los clavos de cristo, deséenle lo mejor a sus muertos. Yo, por si acaso y porque no me fío, lo dejo escrito: llegado el momento, no pido calles ni plazas, solo pido un mejor amigo que sepa escribir mi obituario y un peor enemigo que sepa guardar silencio".

REBECA ARGUDO - LA RAZÓN (Edición Madrid)

2021-12-03

Escritora total

Fue amiga de sus amigos, que es más de lo que puede decirse de tantos

JULIO VALDEÓN - LA RAZÓN

2021-11-28

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